Un total de 2.100 terneros ha aportado Manuka a un promedio de 150 familias al año, todas ellas pertenecientes a la agricultura familiar campesina de las provincias de Chiloé, Llanquihue, Osorno y Cautín, desde el comienzo de su Plan de Crianza de Terneros Machos de Lechería iniciado el 14 de octubre de 2014 y que en julio de este año comenzará a vivir su cuarta versión.

El Plan que comenzó de manera piloto hace tres años, tras una inversión de más de un millón de dólares en ternereras y equipos por parte de la compañía, además del establecimiento de un plan logístico para los traslados de los animales, en cumplimiento estricto de las normativas del SAG. Todo esto acompañado de capacitaciones a los beneficiarios, las que en 2014 fueron desarrolladas por Inia Remehue, organismo que evaluó luego la primera temporada, estableciendo que la sobrevida de los terneros había superado el 85%.

A lo anterior, se sumó la positiva evaluación realizada por la Red de la Leche y la Carne, que estableció que el destino que sus asociados han dado desde entonces y hasta ahora a los animales, ha sido el autoconsumo, tras algunos meses de crianza; mientras que otros los llevaron a término, para transformarlos en bueyes, o utilizarlos como reproductores, aprovechando su alto valor genético o comercializarlos en ferias.

Es a partir de estos antecedentes que Manuka estableció que a la fecha, entre los animales que llegaron a ser consumidos antes y los animales que fueron llevados a término, descontando los animales de mortalidad en la etapa inicial de la crianza, sumarán 600 toneladas de carne.

“Si calculamos sobre esta base el movimiento que generó la cadena desde el campo a la mesa a partir de lo anterior, estamos hablando de alrededor de $1.200 millones de pesos totales, de los cuales cerca $200 millones corresponderían a IVA y $1.000 millones a valor económico creado para todos los actores que intervinieron en el proceso que va desde la crianza, generando trabajo para los agricultores de las AFC; trasportistas; proveedores de alimento; medicamento; insumos agrícolas; comerciantes; y finalmente el consumidor final”, explicó el gerente de Recursos Humanos de la compañía, Kilian Fuentes.

CONSOLIDACIÓN DE UN PLAN QUE COMENZÓ COMO PILOTO

“La verdad es que cuando en 2014 acordamos el inicio del plan piloto, no sabíamos el resultado que tendríamos, porque nosotros somos una compañía productora lechera y existía una serie de opiniones referidas a que el Jersey Kiwi Cross no era la raza adecuada para un proyecto de esta naturaleza. Lo que hemos visto, sin embargo, es que tal como las vacas de esta raza son las más eficientes para trasformar pasto en leche, los terneros han mostrado una gran eficiencia en la transformación de pasto en carne, lo que explica por qué han podido, primero sobrevivir y luego crecer en terrenos cuyas praderas no reúnen condiciones óptimas e incluso están muy lejos de ello”, señaló Kilian Fuentes.

La compañía ha recibido hasta ahora solicitudes de más de mil animales para la nueva temporada de pariciones, los que comenzarán a entregarse en el mes de julio. “Si este año entregásemos 2.000 terneros, podríamos alcanzar los $2.400 millones en estas cuatro temporadas, de los cuales $400 millones corresponderían a IVA, que a la larga es ingreso para el Estado”, añadió Fuentes.

El gerente de Recursos Humanos de Manuka aseveró que “las familias beneficiadas han recibido en promedio alrededor de cinco terneros para crianza, con lo que suman cerca de 150 favorecidos al año que han transmitido su buena experiencia, lo que unido a una coyuntura de descenso de la masa ganadera en el país, ha generado un aumento de la demanda hacia nuestro Plan de Crianza y haremos todo lo posible para poder satisfacerla. Siempre hemos sostenido que es gratificante encontrarse año a año con casos de éxito como los muchos que hemos visto en estos años, más aún si consideramos que esta labor ha sido desarrollada por cerca de un 80% por mujeres que buscan no sólo mejorar sus ingresos, sino demostrar que son un factor importante en esta cadena de valor”.

LAS COMUNAS FAVORECIDAS A LA FECHA

La primera edición del plan desarrollado desde el 3 de octubre de 2014, fue considerada un gran éxito, con 900 terneros entregados a pequeños productores de Purranque, Maullín, Curaco de Vélez, Cochamó y Puerto Octay, por medio de alianzas con esos municipios, y de San Juan de La Costa y Frutillar, a través de la Red de la Leche y la Carne. Fue esto lo que motivó a la compañía a seguir adelante con el plan que contempló en 2015 la entrega de alrededor de 600 animales en de Curaco de Vélez, San Juan de La Costa, Maullín y Fresia; y otros 600 el año pasado, en que se llegó incluso a la provincia de Cautín.

CARACTERÍSTICAS DE LA RAZA

La raza Jersey Kiwi Cross que predomina en los campos de Manuka, es un híbrido proviene de la cruza de la Holstein Neozelandesa y una Jersey Neozelandesa y sus valores productivos en materia lechera, se encuentran por sobre un 5% del promedio de ambas razas.

La cruza logra un animal con una alta producción, pero con un peso vivo alrededor de 50 kilos menor a las Holstein, por lo que logran una mayor eficiencia biológica, ya que el peso vivo es el que determina el costo de mantención del animal.

En materia cárnica, esta raza está predispuesta genéticamente para producir carne con grasa monoinsaturada significativamente más alta que la mayoría de las otras razas, dándole una mayor preferencia en el mercado más de las grasas poliinsaturadas. Tiene, además, altos niveles de grasa intramuscular, lo que ofrece buenas cualidades de veteado.